Ballet
¿Por qué las bailarinas bailan en puntas?
No es curioso que las bailarinas bailen sobre las puntas de sus pies? Si parece algo tan doloroso, ¿por qué lo hacen? Y, además, ¿por qué suele ser algo exclusivo de las mujeres en lugar de los hombres? Lo que muchos no saben es que las zapatillas de punta no solo permiten a las bailarinas parecer más ligeras y etéreas, sino que también tienen un significado más profundo: elevan a la bailarina, literal y metafóricamente. Pero, ¿sabías que el ballet no siempre se bailó en puntas? te lo voy a explicar de una forma sencilla y entretenida.
Todo comenzó en el siglo XV, en la corte italiana, donde el ballet nació como una forma de entretenimiento para la nobleza. Pero no te imagines los movimientos impresionantes de hoy; en aquel entonces, el ballet era más un baile grupal que servía para reunir a los nobles y después invitarlos a unirse. A esta primera etapa se le conoce como el ballet “cortesano”. Nada de saltos ni giros complicados, solo movimientos elegantes para acompañar los banquetes y las fiestas.
El ballet empezó a transformarse cuando Catalina de Médici, una noble italiana, se casó con el rey de Francia. Catalina era una gran amante de esta forma de arte, popularizándola entre la nobleza francesa. Pero la verdadera revolución llegó casi 100 años después con su descendiente, Luis XIV que era conocido como el "Rey Sol" porque en una obra de ballet llamada *Le Ballet de la Nuit*, interpretó a Apolo, el dios del sol. Luis XIV era un apasionado del ballet y vio en esta danza no solo un arte.
Gracias a su visión, en 1661 se creó la primera escuela formal de ballet en el mundo: la *Académie Royale de Danse*. Aquí fue donde el ballet empezó a adquirir la estructura que conocemos hoy. Se definieron pasos, posiciones y técnicas que, con el tiempo, se volvieron universales.
El uso de zapatillas de punta apareció mucho después, a principios del siglo XIX, durante el período romántico del ballet. En este tiempo, el arte buscaba crear un mundo de fantasía, lleno de hadas, espíritus y seres etéreos. Las bailarinas empezaron a usar las puntas pero para dar la ilusión de que flotaban o volaban, eran amarradas a un arnes asi que pronto lo llevaron al siguiente nivel retirando el arnes. La primera bailarina en ser famosa por bailar en puntas fue Marie Taglioni, en 1832, con la obra *La Sylphide*. Aunque la coreografia no es lo mas complicada comparadas con las actuales, lograron cambiar para siempre cómo se veía el ballet, esto se logro debido a que Filipo Taglioni entendio la importancia del entrenamiento físico para poder realizar cosas como esta.🩰
¿Y por qué no los hombres? Bueno, en esa época, los papeles de los hombres en el ballet eran más terrenales; solían ser los que sostenían a las bailarinas o mostraban su fuerza con saltos y giros. Mientras tanto, las mujeres se convirtieron en los personajes principales, interpretando a esas figuras mágicas que solo podían representarse mediante movimientos delicados y ligeros.
Hoy en día, bailar en puntas sigue siendo un reto enorme. Requiere años de entrenamiento, fuerza y resistencia, porque aunque parezca ligero, es todo lo contrario. Sin embargo, esa dedicación es lo que permite a las bailarinas contar historias que nos emocionan y transportan a otros mundos. Así que, la próxima vez que veas a alguien bailar en puntas, recuerda que detrás de ese movimiento hay siglos de historia, arte y técnica. ¡Es algo realmente mágico! 🪄
Comentarios
Publicar un comentario